En ciertas ocasiones los animales sin saberlo se meten en ciertas situaciones que son la mar de peligrosas para ellos. Algo que está claro es que todos podemos sufrir un pequeño percance o accidente pero por lo que sea, los animales suelen sufrirlos más ya sea porque son más despistados, ya sea porque están jugando y no se dan cuenta o ya sea porque han entrado en una zona que no es la adecuada para ellos.
Por ejemplo, nuestro protagonista de hoy tuvo que ser salvado por un grupo de albañiles. Al parecer este grupo estaba trabajando en una planta de cemento, ubicada en Arizona, cuando de repente se encontraron un pequeño animal que casi se había convertido en piedra.
Al parecer el pobre animal se había quedado atrapado en un tanque de cemento que se estaba comenzando a secar poco a poco, la situación era realmente angustiosa para el pobre.
Cuando este grupo de hombres se acercó al lugar dónde se encontraba el animal, se dieron cuenta de que se trataba de un pequeño mapache que todavía seguía con vida. Posiblemente el pobre se había caído en este tanque durante la noche y desde entonces no había podido salir de ahí.
Así que después de saber que el mapache estaba con vida, los albañiles rápidamente comenzaron a rescatar al débil animal que estaba constantemente pidiendo ayuda. Comenzaron utilizando una larga tabla la cual introdujeron en el tanque, para que el mapache pudiera agarrarse y salir de ahí. Gracias a esto, el pobre animalito comenzó a sujetarse y los albañiles comenzaron lentamente a subir de nuevo la tabla.
Sin embargo, en mitad del trayecto el pobre animal agotado cayó de nuevo en el interior del estanque de cemento, pero esto no iba a ser un impedimento ni para los albañiles ni para el pobre animal.
Fue así como en el segundo intento el mapache se agarró mucho más fuerte a la tabla, pues era su única salida. Por fin, después de tal esfuerzo el pequeño mapache salió del recinto y se enrolló con una pequeña bolita, intentaba cubrirse la cabeza con su cola, pero su cola estaba repleta de cemento y se había comenzado a secar.
Rápidamente los trabajadores notificaron al Centro de Conservación de la Vida Silvestre del Suroeste. Una vez en que fue llevado a este centro, varias personas comenzaron a regular su temperatura con numerosas mantas caliente, pero esto fue mala idea ya que el cemento comenzó a secarse de forma más rápida así que decidieron quitarle poco a poco el cemento con máquinas de afeitar, ya que el cemento se había adherido a su pelaje.
Fue un proceso muy duro, complicado y sobretodo delicado, pero al final consiguieron quitarle todo el cemento de su cuerpo aunque el pobre mapache quedó casi sin pelo.
Después comenzaron a aplicarle un poco de agua con vinagre, y un baño relajante de avena. Ambos actuaron de calmante y poco a poco la piel del pobre mapache comenzó a recuperar un color más saludable. Este pobre animalito necesitó varias semanas para recuperarse, pero desde que fue salvado y de su cuerpo se retiró todo el cemento, el pequeño mapache comenzó a recuperar peso y su pelaje volvió a crecer poco a poco, actualmente está casi completamente sano.